Cadenas
Por Claudia Cruz
No hay peor condena para los seres humanos desde mi punto de vista que las cadenas que nos atan de pies a cabeza llamadas: culpa, resentimiento, soberbia, inconformidad, odio, egoísmo, venganza…etc., en fin todas estas emociones y sentimientos que no nos permiten avanzar, porque ocupan nuestro presente en dañar a los demás o en dañarnos a nosotros.
No sé tú que pienses pero cualquier momento es ideal para liberarnos, lo primero es darnos cuenta que las cadenas nosotros decidimos cargarlas de manera consiente o de forma inconsciente y que lo que menos tenemos que hacer es cuestionarnos: ¿porque nos permitimos llegar a este momento? eso ya no importa, lo siguiente sería dejar de esperar que alguien nos cambie o nos libere de nuestras cadenas, en otras palabras: ” que alguien nos salve ” porque no depende de nadie sino de nosotros.
Una vez que esto lo tenemos claro visualiza tu vida de continuar así en unos meses ¿Cómo sería? o mejor aún visualízate en unos años, supongo que tus cadenas son pesadas y con el cansancio a través de tiempo cada vez van a serlo más.
Imagina tu imagen con esas cadenas si lo haces con honestidad seguramente vas a entender porque te cuesta tanto trabajo tomar decisiones a tu favor y sentirte en control de tu vida.
Te propongo algo: Decídete hoy, no dejes pasar un día más, solo tienes una vida “libérate” de tus cadenas con valor y si ya tu cansancio es mucho y no puedes tú solo, entonces pide ayuda y has lo que tengas que hacer hasta que lo logres, tú vales la pena y mereces sentir la ligereza con la que puedes dar pasos hacia a delante en tu camino, con la energía suficiente, para dirigirte a tu progreso y con amor a tu bienestar.