Rafael Loret de Mola – Canjes con Ofertas

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Por Rafael Loret de Mola

Bien les va a los sinvergüenzas en este gobierno, o sin gobierno, de enrique peña nieto. Los funerales de Mario Vázquez Raña fueron buena prueba de ello recientemente: quien más usufructuó su imperio periodístico, a cargo del erario público, fue exaltado como “mexicano ejemplar” sin haberse reconocido jamás su condición de “gallego”. Alguna vez el insolente llegó a decirme que, en todo caso, tal era mejor que ser yucateco y le respondí:

–No se trata de discriminar a nadie por cuestiones de nacencia; sino de señalar a quienes son unos farsantes por mentir desde la cuna. Y en cuanto a ser yucateco, me honra tener la sangre que aún vibra en quienes exaltan al Mayab eterno… sin que niegue además que mis ancestros fueron gallegos, precisamente por la línea materna.

Sobre el particular recibí algunos mensajes en el sentido de que no es de personas con honor “hablar mal de quienes ya no están en este plano terrenal”. Y debí replicar que entonces, bajo este criterio, no podría escribirse la historia porque, en todo momento y lugar, habría familiares de los difuntos que se sentirían agraviados si el sentido de los hechos narrados no fueran sustantivamente laudatorios. Una torpeza gigantesca. Contar la verdad no tiene el amortiguador del honor; en todo caso escojo la libertad por encima de los prejuicios atávicos y los lugares comunes que deforman los criterios de cuantos optan por blindarse para no asumir riesgos. Son a éstos a quienes necesitan los embusteros y los manipuladores al servicio del poder.

Un lector amigo, cuyo nombre no cito porque no he sido autorizado por él, me mandó un correo que me estremeció:

–“Durante doce años se condenó a fox acusándolo de haber dejado ir a “El Chapo” Guzmán de la prisión de alta seguridad de Puente Grande, Jalisco. Pero, ahora, ¿cuántos van y nadie suma?”.
Tiene toda la razón aun cuando no se exprese como admirador de la pareja ex presidencial cuya negligencia extrema –sin proyecto ni conducción- paralizó al país y lo hizo susceptible al ataque feroz de las mafias por él “toleradas”. A los grandes capos y sicarios, además de los cabecillas de secuestradores y asalta-caminos, les viene muy bien tener en Palacio Nacional a un inútil que a un verdadero patriota, a un socio y no a un mandatario capaz de imponerse a las tentaciones del poder y actuar con el sentido común de la ciudadanía atenaceada. ¿Hace cuánto tiempo que ya no entra a Los Pinos un líder auténtico?

Además de los “capos” en apariencia ajusticiados en este periodo federal, hay ya un listado bastante grande de sujetos execrables quienes no sólo no salieron de las prisiones bajo tretas escapatorias con las complicidades correspondientes dentro de las mismas, sino que lo hicieron por efecto de los “errores procesales” cuyos efectos contemplan la liberación pero no así la declaratoria de inocencia alguna como pretenden los eternos intérpretes de los hechos destinados a confundir a quienes se apegan a la lectura rápida y dejan de observar lo esencial.

El hecho, insisto, es que a los peores les va bien cuando en el gobierno mandan los ambiciosos deseosos de ser cooptados o los tímidos agazapados dispuestos a aprovechar el tiempo para blindarse económicamente para compensar sus seis años en la mansión de los fantasmas perversos, en la residencia oficial digo. Desde Lázaro Cárdenas al actual huésped, ¿quiénes se salvan ante el juicio inexorable de la historia? Hagamos cuenta intentando no horrorizarnos. ¡Urgen varios exorcistas por allí!
Analicemos algunos casos recientes:

1.- La liberación política de Florence Cassez, recibida como heroína en Lille, Francia, su ciudad natal, bajo el considerando de haber sido víctima de la persecución judicial en México. Nada más falso. La señora, novia de Israel Vallarta, líder de la banda “Los Zodiacos”, y con quien convivían los padres de ella con la mayor naturalidad –deberían ser ciegos o imbéciles para no darse cuenta de cuanto sucedía a su alrededor-, salió de prisión el 23 de enero de 2013 luego de permanecer confinada por siete años.

Nunca fue exonerada por su evidente participación como secuestradora, como alegaron sus voceros y ella misma en la tierra gala, sino que su salida se debió a las amplias avenidas dejadas a su favor por los montajes y procedimientos ilegítimos perpetrados por genaro garcía luna, genízaro de felipe calderón. Y de ello derivó la patraña de Nicolás Sarkozy, entonces presidente de Francia, para presionar al gobierno mexicano con lo cual se hubiese colocado al país entre los territorios en donde se vive la subcultura de la justicia. Menos mal que calderón –a quien tanto cuestionamos- se mantuvo firme en este caso pese a las trampas de garcía luna para crear una conflictiva internacional que reventó al cancelarse el “año de México” en París.

Pero llegaron peña nieto y Francois Hollande al poder y, con evidente acento demagógico y sin medir consecuencias, negociaron la exoneración de la raptora –reconocida por varias de sus víctimas-, bien defendida por una pléyade de abogados de primer nivel quienes se concentraron en las desviaciones evidentes de las instancias jurídicas. El colmo es que una delincuente consumada, que nos hirió en lo más sensible del cuerpo místico de la República, se atreva ahora a proponer que se le causó un daño moral valorado por ella en treinta y seis millones de dólares y extienda su capacidad como negociadora igual que si siquiera secuestrando y atormentando a sus rehenes. ¡Y ahora con permiso superior!

2.- Rafael Caro Quintero permanecía en prisión desde 1985 luego de ser arrestado en Costa Rica junto a su “novia” Sarita Cosío, menor de edad y sobrina del ex gobernador de Jalisco Guillermo Cosío Vidaurri, como responsable de crímenes innumerables y, sobre todo, por el asesinato del agente de la DEA, Enrique “KIKI” Camarena Salazar y su piloto mexicano, Alfredo Zavala –curiosamente a éste casi nadie le recuerda-, en febrero del año citado y en el rancho “El Mareño”, Michoacán.

En aquella ocasión, el gobernador de la entidad, Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, todavía priísta, condenó la violación a la soberanía territorial michoacana al intervenir agentes federales y militares sin consentimiento del gobierno local, hollando los principios básicos en los que se asienta el modelo republicano. Ni quien le hiciera caso, naturalmente, bajo el fuero de miguel de la madrid y manuel bartlett díaz –ahora bajo los pantalones del izquierdista Andrés Manuel López Obrador-, convirtiéndose este punto en el inicio de la “corriente democratizadora” que devino, finalmente, en la candidatura presidencial de Cárdenas en 1988.

Pues bien, Caro fue liberado el 9 de agosto de 2013, tras veintiocho años encarcelado, y cuatro semanas más tarde reaccionó la representación diplomática de los Estados Unidos para exigir su reaprehensión con “nuevos” cargos y la consiguiente solicitud de extradición.

3.- El hermano “incómodo”, raúl salinas de Gortari, fue aprehendido a finales de febrero de 1995 y permaneció en prisión una década, pasando de un penal de alta seguridad a otro de carácter regional en Almoloya de Juárez. Se le acusó, entre otras cosas, de haber administrado dinero procedente del narcotráfico y la consiguiente protección a éste durante la gestión de su fraterno menor, carlos. Dejó la celda diez años después, en 2005 –todavía bajo el régimen foxista deplorable- y recientemente el juzgador determinó que le fueran devueltos doscientos veinticuatro millones de pesos –y lo que falta le serán dados en fecha próxima-. Hace poco se mostró feliz al exhibir un deportivo de lujo, valuado en dos millones, en vez de las carretas que jalaba en confinamiento.

4.- Sandra Ávila Beltrán, conocida como la Reina del Pacífico –en ella se inspiró el novelista español Arturo Perez-Reverte para escribir “La Reina del Sur”-, casada tres veces con sendos elementos ligados al narcotráfico, dejó la prisión por la puerta grande el domingo 8 de febrero de 2014 luego de siete años encarcelada por acusaciones tales como lavado de dinero, delincuencia organizada y “conspiración”.

Figura central de varios “corridos” norteños famosos, considerada una mafiosa de altos vuelos, no pudo ser condenada, en ausencia de pruebas y por “negligencia” de la PGR –ésta suele dejar cabos sueltos cuando se trata de encubrir a quienes compran su libertad por diversos medios-, y ahora se encuentra feliz en pleno goce de sus utilidades. Como Florence, la francesita macabra.
Sí, la administración de peña nieto ya le saca amplia ventaja a la de los fox y a la de calderón en materia de simulaciones judiciales. Además, tras la aprehensión del célebre Joaquín Guzmán Loera, “El Chapo”, el 22 de febrero de 2014, esto es hace poco menos de un año, nadie habla ni recuerda a sus sucesores al frente del cártel de Sinaloa, Dámaso López Núñez, “El Licenciado”, e Ismael “El Mayo” Zambada, quienes le dejaron solo, al aire, para que pudiera ser capturado su aparente “jefe”. ¿Sólo una coincidencia o la confirmación de un pacto para vengar el honor presidencial? No se olvide que “El Chapo” amenazó de muerte, por teléfono, en 2008, al entonces gobernador mexiquense, enrique peña nieto. Y las cuentas se saldan.

Esta es la turbia historia del poder en la era peñista. ¿Quién apuesta a que no gana la historia el maquillado mandatario, enfermo además, aferrado al cargo… pero sin capacidad para ejercerlo?

Debate

Cuando las declaraciones contradicen la realidad exhiben la total descomposición, política y moral, de quienes las generan dentro del gobierno. En el régimen actual, los constantes tropiezos del señor peña nieto culminaron con na queja tan absurda como voluble, ante un apretado grupo de reporteros de la fuente cansados de tomar nota de acciones poco claras:

–¡Ya sé que no aplauden!

Pero después han llovido otras como en catarata. Por ejemplo, el procurador jesús morío –murillo- karam, quien alegó estar muy cansado, aseguró que la “verdad histórica” sobre los desaparecidos de Ayotzinapa –misma que desató una crisis de credibilidad contra el gobierno mexicano-, era que éstos habían sido asesinados y cremados aun cuando no tenía en sus manos evidencia alguna, a la ligera. Por supuesto, los peritos, unos de nacionalidad argentina contratados por la propia PGR y ahora descalificados por la misma porque no le siguieron el juego, se han negado a avalar la versión oficial sembrando severas sospechas de hasta donde alcanzan las responsabilidades.

Y, por si fuera poco, el secretario de la Defensa Nacional, el general Salvador Cienfuegos Zepeda, aflora como un profundo manipulador de conciencias:

–“Hay quienes quisieran alejarnos del pueblo” –tronó hace unos días, en el preámbulo del “día del ejército” y con motivo de la “Marcha de la Lealtad”… al presidente Madero-.

No sé a qué podría referirse. El Destacamento Militar Número 27, en Iguala, no intervino, a decir de sus mandos, en los sucesos del 26 de septiembre pasado, cuando los normalistas de la Escuela “Isidro Burgos” de Ayotzinapa eran perseguidos y ejecutados. Se limitaron a recorrer hospitales según la versión oficial. ¿Es así como están cerca del pueblo? Y ni qué decir de los hechos de Tlatlaya en donde vaya si estuvieron junto al pueblo… disparándole hasta masacrar a veintidós civiles, entre ellos un niño y una jovencita. Más valdría que los uniformados se mantuvieran alejados a falta de moral y dirección correctas.

Pero nadie juzga ni castiga las falacias; sólo algunos que nos atrevemos rompiendo las viejas reglas en las que encuadraban al ejército cuyas acciones eran observadas como parte de la función de preservar “la seguridad del Estado”. Ahora prevalece el “corre que te alcanzo” cuya culminación es la labia del señor general secretario. Puras bufonadas.

La Anécdota

En marzo de 1989 visité al general Arturo Riviello Bazán, en funciones de secretario de la Defensa Nacional. Pretendía que, tres años después del crimen, me permitiera conocer el “parte militar” sobre el paso de Carlos Loret de Mola Mediz por el retén “El Güirindalito” cercano a la barranca “El Filo Mayor” donde fue arrojado el automóvil del ex gobernador yucateco. Y, de entrada, me dijo:

–Pero sé que usted es, en este asunto, contraparte del ejército, esto es afectada.

–Soy sólo un mexicano que exige justicia –le respondí-.

Y me mostraron el “parte” respectivo sin permitirme sacarlo de las oficinas ni copiarlo. Sólo mi memoria fue fiel. ¿Esto es también estar cerca del pueblo?