¡¡¡PIÉNSELE UN RATO!!!
Un analista político y trabajador del volante, en uno de los estados más conflictivos del país, me hizo uno de los resúmenes más sentidos en esa región de lo que se avecina luego de la toma de posesión de EPN. Es bien sabido que quienes son voceros directos, informantes de los decires y termómetros emocionales de la gente de a pie, son los taxistas. Dice el joven, luego de preguntarle por el ánimo de la población, que me asome a la orilla de la carretera y observe a dos patrulleros que miran a un cuerpo en la cuneta. No distingo más que a los uniformados que igual pueden sólo estar orinando. Aún así, todo se percibe con criminalidad… a los visitantes, a los preguntones, a los que decimos que cómo les va con tanto muerto.
Preguntamos y nos responde: «está bien… la regamos, votamos por Fox y nuevamente la volvimos a regar votando por Calderón… pero ahora… nos van a robar y robar, pero por lo menos ya no habrá muertos, ya no estaremos en medio de las balaceras», asegura este muchacho que se dice cetemista y que por mucho tiempo ha esperado que le otorguen placas permanentes. «Vale la pena estar pobre, pero vivo», afirmó este padre de familia y recientemente adherido a las filas priistas… sabedor de que «no se van a hartar de saquear, pero volveremos a vivir». Al respecto de la vida familiar, el taxista, dijo que las formas de relacionarse con su esposa e hijos desea que vuelvan a la normalidad, que ir a dejar a los niños a la escuela no le implique a las mujeres más que el peligro de cruzar con cuidado las calles… que las madres no reciban, a cada rato, las llamadas de extorsión que prometen las cabezas de los hijos, que pueda trabajar en las noches para que no mermen sus ingresos, etc. Así las cosas por aquellos lares y, mientras, pocas convocatorias nos llaman a la lucha, entre otras, una de las más extrañas (por decir lo menos) la reciente Convención Nacional Sindical en Defensa de las Conquistas Laborales, reunión de sindicatos charros, neocharros, casi charros y requetecharros, entre los que destacan: la UNT, FSM, SME, CROM, COCEM, SUTGDF, CROC, SUTIN, ASTINVI, SUTUACM, FTDF, STUNAM, entre otros y hasta el SUTIEMS. Quienes entre su combatividad llaman airosos a: 1. Integrar una Instancia de Coordinación Nacional con los dirigentes de nuestros sindicatos, que se encargará de instrumentar y precisar el Plan de Acción de la Convención (no la base, sólo la dirigencia). 2. Reforzar la campaña nacional en contra de la reforma patronal utilizando las redes sociales y las formas tradicionales de comunicación, como mantas y carteles (nada de brigadas de información, sólo si tienes facebook estás en lucha). 3. Realizar una gran Marcha Nacional en un día domingo (¿?). 4. Realizar una amplia consulta nacional entre los miembros de nuestros sindicatos para definir si el próximo 20 de noviembre se realiza un paro o huelga nacional (día festivo). Como dice un compa muy sabedor de estos asuntos, no hay problema que se reúnan… el problema es que se reúnen para no hacer nada.
(Fuente de información: Revista. El Zenzontle).