Editorial: Un fin de año problematico
Se termina el año, el 2014 ya se nos va, pero se lleva muchas cosas, sobre todo para nuestro “flamante” Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, al final logró cumplir con mucho trabajo su segundo año de gobierno, el cual cierra con fuertes críticas internacionales, protestas por todo el mundo y sobre todo termina México en el ojo del huracán, llamando la atención de investigadores y periodistas de todo el mundo.
Sigue la problemática con estudiantes y manifestantes por los 43 desaparecidos de Ayotzinapa, una situación que pareciera salirse de control, tal vez, se pueda resolver o tal vez no, pero lo que si es cierto es que una vez más se demuestra las carecías del sistema político mexicano, ahora aparecen los llamados “anarquistas”, que no se sabe de donde salieron, quiénes son, quién es su líder, lo único que se sabes es que llegaron para destrozar todo a su paso, dicen estar a favor del movimiento de los 43 desaparecidos, pero con sus acciones demuestran estar en contra e incitar a la violencia.
Pero eso no es todo lo que sucede, en este final de año en muchos municipios no se pudo llevar acabo el tradicional desfile del 20 de noviembre con motivo de la celebración de la revolución mexicana, porque existía el riesgo de fuertes manifestaciones que lo impidieran, y en los lugares donde se realizó, se presentaron manifestantes, esto sucedió a lo largo y ancho del país, pero sobre todo en grandes ciudades del extranjero, una situación crítica que no termina.
Después llegó el resultado de las investigaciones sobre la adquisición de la llamada “casa blanca” de la primera dama, Angélica Rivera, un escándalo más que llegó directamente a Los Pinos, que extrañamente (para la cantidad de publicitas y especialistas de imagen que existen en la administración de la Presidencia de la República) se trató de resolver, pero se hizo de la peor manera posible, haciendo el hoyo más grande.
Pero con todo esto parece ser que Peña Nieto seguirá en el poder durante un rato o al menos esta navidad y año nuevo lo pasará sentado en la silla presidencial, aún cuando se exige su salida, la cual se tiene que estudiar muy bien, porque en un país donde existe inestabilidad social, un cambio de presidente, aún cuando sea por enfermedad, podría complicar las cosas o posiblemente mejorarlas, pero eso es un riesgo muy grande, al que se enfrentará el Gobierno en el siguiente año electoral.
Pero aún con esto, la navidad y año nuevo se celebrarán, aún con el incremento del dólar a más de 14 pesos y el turismo reducido en Acapulco, pero como se dice por ahí “la vida sigue” y los integrantes de La Balanza Prensa la Noticia les desean una feliz navidad y un próspero año 2015.
Por Christian González Murillo