Tiburón una bestia asesina a 40 años de su estreno
Por Elizabeth Piña Hernández
Sin un guion ni actores definidos, Steven Spielberg realiza la mayor hazaña de su carrera llevar a la pantalla grande el best-seller “Tiburón” de Peter Benchley la cual llegó a posicionarse en los primeros lugares del raking de los libros más vendidos, novela que había cautivado a una gran audiencia, su versión fílmica significaría un gran éxito en el cine norteamericano de los años 70´s, de hecho lo transformaría para siempre, pues logró sembrar el terror en toda sus dimensiones pues nunca antes se había hecho algo parecido.
La película relata la historia de cómo un tiburón blanco ataca la costa de una pequeña isla ubicada en el este de Estados Unidos; en los papeles principales contó con Roy Scheider que interpreta al jefe de policía Martin Brody, Richard Dreyfuss al oceanógrafo Matt Hooper, Robert Shaw al cazatiburones Quint, Murray Hamilton al alcalde de Amity Island y Lorraine Gary a Ellen, esposa de Brody.
Con tan solo 27 años y con la ayuda de los productores David Brown y Richard D. Zanuck, el joven director se envuelve en un desafío enorme al filmar fuera de los estudios Universal Pictures y encontrarse con un océano pacifico revelador ubicado en la isla.
Pero su mayor reto era el personaje principal el tiburón y construirlo no fue fácil, esto llevó a Steve a solicitarle a un dibujante un par de bocetos los cuales le ayudarían a construir a la bestia del océano, donde más tarde mando a traer a quien Joshua Meador había construido el monstruo de la película 20. 000 leguas de viaje submarino (1869) dirigida por Richard Fleischer para hacer el tiburón quien midió 8 metros de largo.
El terror, el suspense y la aventura entrelazan los lazos fuertes que tenía con su pasado trabajar en la dimensión desconocida y con una anterior película titulada Duel, con su poca experiencia entendería el cine comercial al tener un record de taquilla el cual hasta nuestros días es su mayor referencia.
Tiburón nos remite a la película de La mujer pantera (Tourneur, 1941), donde al monstruo se construye a través de la sugestión por eso no lo vemos hasta el final; también nos remite al estilo Alfred Hitchcock, donde el suspenso y el terror suceden a través de un hecho que nadie ve y nadie sabe de dónde vienen. El centro son los personajes, sus gestos y su miedo son lo que da vida a sus manifestaciones.