Llama la CODHEM al diálogo, el acuerdo y la concordia en torno al matrimonio igualitario
- Deben garantizarse los derechos de libertad, igualdad y no discriminación
- Convocó a alcanzar el consenso legislativo y lograr el reconocimiento jurídico de las uniones de personas del mismo sexo
- Como sociedad debemos avanzar hacia la normalización de la adopción por parte de parejas homosexuales
Toluca, Estado de México.- La Defensoría de Habitantes se pronuncia a favor de que en el Estado de México se garanticen plenamente los derechos de libertad, igualdad y no discriminación y el respeto a las uniones de personas del mismo sexo; también hace un llamado para que las dependencias del gobierno estatal, instituciones descentralizadas, autónomas y los 125 ayuntamientos aseguren un trato digno e igualitario a dichos matrimonios y su derecho a la adopción.
A través de un documento firmado por el ombudsperson Jorge Olvera García, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem) convoca a que, por los caminos del diálogo, el acuerdo y la concordia, se encuentren las convergencias y consensos necesarios para que las y los diputados de la LX Legislatura efectúen las modificaciones legales pertinentes encaminadas al reconocimiento jurídico de las uniones de personas del mismo sexo, a efecto de asegurar la simetría en el trato a quienes habitan o transitan por la entidad mexiquense.
Actualmente, el Código Civil del Estado de México, en su Artículo 4.1 Bis contradice al artículo 4º de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, según el cual “el varón y la mujer son iguales ante la ley.” Además, en el mismo precepto se señala que la ley “protegerá la organización y el desarrollo de la familia.”
En ese sentido, la Codhem precisa que en la solución a ese conflicto normativo debe prevalecer el principio de no discriminación, previsto constitucional e internacionalmente, a partir del cual, todas las personas merecen un trato igual y digno.
El documento señala que “Los principios de igualdad y libertad representan un sólido andamiaje para establecer que toda persona tiene derecho a decidir con quién unirse en una relación de pareja.”
La Codhem advierte que la homofobia se ha enquistado en nuestra sociedad provocando otras formas de vulneración a los derechos humanos, “visibles en la discriminación, el rechazo y el trato diferenciado para quienes desde su libertad deciden unirse a otra persona del mismo sexo y tienen el derecho a que esta unión sea protegida por la ley, la cual no puede ir más allá de los límites que la misma libertad personal impone.”
Expone que “Los derechos humanos no pueden florecer en un campo definido por el tratamiento asimétrico de las personas; la igualdad que ubica en idéntico plano a personas diferentes, tal es el caso de la prohibición o permisividad de los matrimonios o uniones entre personas del mismo sexo.”
La Codhem considera lamentable que la lucha por el reconocimiento pleno de la libertad, la igualdad y la no discriminación, no hayan encontrado aún una respuesta positiva en las entidades federativas, salvo en la Ciudad de México, y los estados de Campeche, Chihuahua, Colima, Coahuila, Michoacán, Morelos, Nayarit, Quintana Roo, que ya incluyeron en sus respectivos ordenamientos civiles la posibilidad de que una persona pueda unirse a otra del mismo sexo.
Agrega que el reconocimiento a la homoparentalidad de parejas lésbicas o gays, implica un ejercicio de tolerancia y no discriminación, más allá de los alegatos que puedan o no cuestionar la legitimidad de este tipo de uniones. Por tanto, la visibilización de las formas de unión en las que parejas del mismo sexo pueden adoptar hijos e hijas, es un avance a favor de la igualdad y el pleno respeto a la libertad.
Por último, subraya que como sociedad debemos avanzar hacia la normalización de la adopción por parte de parejas homosexuales, para ofrecer a esos nuevos tipos de familia, una vida de inclusión y bienestar libre de discriminación, por tanto, adecuar el derecho a la realidad es tarea de los gobiernos.