La CODHEM llama a prevenir la violencia política de género
Se pronuncia la Codhem a favor de dar paso a una nueva era para la democracia, en la que la voz de las mujeres no sea acallada y sus talentos se incorporen para avanzar socialmente en igualdad.
Insta a los 125 Ayuntamientos, poderes públicos, organismos autónomos e instituciones políticas, electorales, sociales y de gobierno, a ser agentes activos que promuevan el respeto a los derechos políticos de las mujeres.
Ante el próximo proceso electoral, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México (Codhem) llama a las autoridades, instituciones y organizaciones involucradas en él, a promover, hacer valer y defender los derechos políticos de las mujeres en la entidad mexiquense, a fin de garantizar su participación libre y protegida.
En un Pronunciamiento la Codhem solicita hacer a un lado la simulación y dar paso a una nueva era para la democracia, porque la que la voz de las mujeres “no puede ni debe ser acallada y sus talentos han de ser incorporados para avanzar socialmente en igualdad”; al mismo tiempo, refrenda su compromiso con ese sector de la población.
En el documento firmado por el ombudsperson Jorge Olvera García, el Organismo insta a los 125 Ayuntamientos, poderes públicos, organismos autónomos e instituciones políticas, electorales, sociales y de gobierno, a ser agentes activos que promuevan el pleno respeto de los derechos políticos de las mujeres, erradicando la misoginia, el machismo, la discriminación y cualquier expresión de violencia en espacios de participación y decisión, además de reconocerlas como protagonistas políticas.
La Defensoría de Habitantes admite que alcanzar la plena participación política de la mujer todavía es un reto y que para lograrlo, los Estados deben comprometerse a abrir y asegurar espacios para que participen sin limitaciones ni obstáculos. En este sentido, enfatiza aquellos obstáculos que vulneran sus derechos humanos en general y los que ponen en riesgo su integridad física y su propia vida.
La paridad de género y su respeto, prosigue, es un tema urgente para fortalecer la democracia en la entidad, por ello, el desafío es que las instituciones responsables de aplicar políticas públicas para la promoción, protección y garantía de la participación política de las mujeres, realicen su labor con perspectiva de derechos humanos y con personal preparado y sensibilizado, aspecto en el que la Codhem seguirá contribuyendo a través de foros, congresos y capacitación especializada.
Por tanto, la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México se pronuncia a favor de la protección total del derecho de las mujeres a no ser discriminadas, a ser valoradas y educadas libres de patrones estereotipados de comportamiento y prácticas sociales y culturales basados en conceptos de inferioridad o subordinación.
Cabe mencionar que en otros pronunciamientos y en la Recomendación General 1/2018 sobre la situación de la violencia de género y feminicida, la Codhem ha manifestado y hoy refrenda “su más alto compromiso y les hace saber que ante cualquier tipo de violencia no están solas, que existen instituciones con el deber de protegerlas” y la Codhem está para orientarlas y acompañarlas.
El organismo autónomo destaca que el ejercicio pleno de los derechos políticos electorales de las mujeres no solo comprende la paridad de género en la postulación de cargos públicos y de representación popular, sino también la garantía de que durante su participación no sean víctimas de ningún tipo de violencia por ejercer sus derechos político electorales.
La Codhem reconoce los progresos derivados de instrumentos internacionales tendentes a combatir la violencia de género y que favorecen la coordinación entre organismos protectores de derechos humanos, movimientos feministas y organizaciones de la sociedad civil, que las han posicionado como personas detentadoras de derechos y libertades.Finalmente, la Codhem condena de antemano cualquier atentado a la dignidad e integridad de las mujeres al ejercer sus derechos políticos electorales; y reitera la necesidad de un cambio profundo de mentalidad para lograr una participación respetada, efectiva y plena.